Interfaz y la experiencia del lector-usuario
La relación entre la interfaz y la base de
datos es clave para la experiencia del lector-usuario, especialmente en el
contexto de la literatura electrónica. Una interfaz de algún tipo es necesaria
para usar cualquier ordenador, claro está, pero la interfaz para una obra
literaria que utiliza una base de datos puede determinar exactamente como se
accede la información y cómo se desarrolla la narrativa.
Lev
Manovich dice que “database and narrative [are] natural
enemies” pero sin embargo, “a database can support narrtive” (Paul, 129). Dice esto por las relaciones en una base de
datos que no se definen de manera lineal. Hay varios tipos de relaciones en las
bases de datos, como explica Paul en Database.
Éstas, con la interfaz de la obra, definen la experiencia del usuario. Por
ejemplo, en la obra que vimos para esta semana, Como el cielo los ojos de Judith Checa, el lector se presenta con
una tabla de opciones, cada una teniendo una relación distinta entre el
capítulo y el personaje. Aquí la interfaz requiere sólo el ratón, y el lector
ve todas las opciones (o partes de la historia) a la vez. Sin embargo, este no
es siempre el caso.
En la obra clásica Uncle Roger de Judy Malloy (1986), no se
ve todos los fragmentos de la narrativa, sino hay que buscar por palabra clave.
Esta interfaz requiere un teclado porque hay que entrar dos o más palabras
claves para ver la relación que existe entre ellas y los fragmentos que tiene
algo que ver. De este modo, a manera distinta de Como el cielo los ojos, el lector-usuario se va enterando de la
historia de manera menos fija. Hasta aquí he mencionado sólo las interfaces
comunes de la computadora, es decir, el ratón y el teclado. Pero, me interesa mucho
la pregunta, ¿Qué pasa con la literatura electrónica y la base de datos en
general con otra interfaz?
Carl Therrien en Interface escribe: “The interface can Project the user in specific
make-believe scenarios where embodiment is defined precisely: primary actions
(P-actions) on the interface are mapped onto actions in a virtual world”
(Therrien, 305). Esta definición
me parece apta para la mayoría de las interfaces hasta ahora desarrolladas. Sin
embargo, actualmente está emergiendo otra interfaz en la esfera de la realidad
virtual. Esto es, la tecnología de la realidad aumentada. Este vídeo muestra
tal producto de Mircrosoft, el HoloLens:
Cómo puede verse,
esta interfaz hace posible otro tipo de interacción porque la vista normal del
mundo se ve mezclada con imágenes superpuestas en ella. Si se piensa una obra
de base de datos como Uncle Roger o Como el cielo los ojos, pero en un
formato así, las posibilidades de interacción y acceso son casi infinitas. Uno
puede acceder a fragmentos de una historia mediante diferentes movimientos del
cuerpo, o por estar en una ubicación dada. En este caso, la interfaz hace que
las líneas entre la realidad y lo virtual se queden borrosas, y casi cada
acción física del humano puede servir para manipular la información en una base
de datos o interactuar con una historia fragmentada
no lineal.
Obras consultadas:
Emerson and
Robertson (eds.). The John Hopkins Guide to Digital Media.
Baltimore: John Hopkins UP, 2014.
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